miércoles, 4 de octubre de 2017

Crema helada de plátano

Desde la única idea del aprovechamiento de un par de plátanos que ya no tenían opciones de ser consumidos, acabo de hacerme una de las mejores meriendas de los últimos meses, me atrevería a decir años...

Ingredientes:

- 2 Plátanos maduros (en mi caso muy muy maduros)
- 1 Cucharadita de esencia de vainilla
- 1 Pizca de canela en polvo
- 1 Chorrito de leche o bebida vegetal (en mi caso de avena)
- Coco rallado
- Perlas de chocolate negro

Como comentaba, tenía dos plátanos en la nevera de esos que no puedes pelar sin que se rompan, pasaditos pasaditos, con además un par de viajes en bolso a sus espaldas... Viendo su situación, la primera idea fue tirarlos pero me duele el alma si tiro comida por una mala gestión por mi parte, así que les di una oportunidad...

En el vaso de la batidora directamente he picado en rodajas gordas, de unos 2 o 3 centímetros, y las he metido en el congelador.

Unas 4 horas más tarde he sacado del congelador el vaso con el plátano, estaban duritas las rodajas, he añadido un chorrito de leche, la cucharadita de esencia de vainilla (muy ligera, no me gusta que sepa demasiado a vainilla) y un par de espolvoreados de canela en polvo.

Con la batidora de brazo, se comienza a batir, apretando para poder llegar al fondo e intentando mover el vaso para mezclar con la leche, que ayudará a que se vaya formando la crema de plátano. Se bate hasta tener una crema espesa y homogénea, parecida a una mousse cremosa. 

Una vez conseguida la textura deseada, es importante hacerlo de la forma más rápida posible y sin remover en exceso la crema conseguida para intentar servir y consumir con su textura helada, teniendo en cuenta que es lo que pretendemos conseguir. Cuanto más rápidos seamos, más helada se mantendrá y más cuerpo tendrá la crema/mousse.

Para servir solo hay que ponerla en un recipiente y si se desea se añade algún topping al gusto, en mi caso he añadido un poco de coco rallado y unas perlas de chocolate negro.

Y ahí tenemos una merienda diferente, riquísima y bastante saludable, pues no deja de ser fruta natural sin azúcares añadidos.


Ha quedado espectacular.


Ana

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